El Parlamento Europeo, ha aprobado este martes "la reforma de la directiva comunitaria sobre cultivos transgénicos" , unos cambios que llevaban bloqueados desde hace cuatro años. La Unión Europea se ha decantado por no fijar una posición única y ofrece la posibilidad a los distintos Gobiernos de prohibir los cultivos que otros Gobiernos sí pueden admitir.
España, el principal productor de maíz transgénico de la UE, se ubica claramente en el bloque de Estados favorables a este tipo de cultivos.
España, el principal productor de maíz transgénico de la UE, se ubica claramente en el bloque de Estados favorables a este tipo de cultivos.
Los cambios no parecen haber contentado a nadie. Para Monsanto , la única empresa que opera ahora en Europa con su maíz transgénico, que los Estados puedan prohibir las autorizaciones para nuevos cultivos modificados "socava el mercado único".
Justo en la postura opuesta está Ecologistas en Acción, para quien los cambios aprobados, que entrarán en vigor en primavera, implican "agilizar la tramitación de nuevos transgénicos", algo de lo que se beneficiarán las empresas.
El Ministerio de Agricultura no ha ocultado que el objetivo que ha perseguido España en las negociaciones ha sido que se desbloqueara la aprobación de los permisos para los nuevos cultivos que ya cuentan con el aval de la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria. Pero la división de opiniones entre los países hace que no exista una mayoría suficiente para aprobar o rechazar esos nuevos permisos que están "en cola".
Greenpeace, al igual que Ecologistas en Acción, ha interpretado que los cambios introducidos permitirán que algunas comunidades autónomas cumplan su deseo de vetar los transgénicos. "Animamos a las comunidades autónomas a seguir los pasos del País Vasco y solicitar la prohibición de estos cultivos en su territorio", ha sostenido Greenpeace. El Ministerio de Agricultura recuerda que las autorizaciones para cultivos son competencia estatal.
Esta es una buena decisión, aunque ningún gobierno puede prohibir completamente la intrusión de alimentos genéticamente modificados en su territorio. Vienen en diferentes formas ocultas.
ResponderEliminarSería difícil tener una política unitaria sobre un tema tan divisivo
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