
Según el plan de la NASA, el primer lanzamiento del SLS (SLS-1), sin tripulación, tendría lugar en 2017 y serviría para colocar una nave Orión/MPCV alrededor de la Luna. Pero habría que esperar hasta 2021 para ver la primera misión tripulada, durante la cual cuatro astronautas alcanzarían la órbita lunar a bordo de otra Orión. De todas formas, no sería hasta 2032 cuando hiciera aparición la versión pesada del SLS con capacidad para colocar 130 toneladas en órbita baja.Este plan pronto fue criticado por todos los flancos. A la falta de un objetivo claro y el elevado coste del programa, se sumaba el enorme tiempo que debía transcurrir entre lanzamiento y lanzamiento. Consciente de este problema, la NASA está sopesando la opción de lanzar la primera misión lunar tripulada del SLS (SLS-2) en 2019. Por supuesto, no se pisaría la superficie de la Luna, ya que para eso hace falta un cohete más potente y un módulo lunar, algo que no estará disponible antes de muchos, muchos años. Es decir, la misión sería una repetición de la gesta que realizó el Apolo 8 hace casi 43 años. Por supuesto, esta misión lunar depende a su vez del desarrollo de la Orión, que debe volar por primera vez sin tripulación (OFT-1) a bordo de un cohete Delta IV Heavy en diciembre de 2013.Y hablando del MPCV/Orión, no olvidemos que siguen las conversaciones entre la NASA y la ESA para construir esta nave de forma conjunta. La ESA se encargaría de diseñar el módulo de servicio de la Orión usando la tecnología del ATV europeo, lo que permitiría a la NASA ahorrar una cantidad importante de tiempo y dinero en el proyecto. Personalmente, creo que hay muy pocas probabilidades de que esta "euro-Orión" salga adelante, pero de hacerlo sería un aliciente significativo para mantener las misiones lunares.
No hay comentarios:
Publicar un comentario