Influencias externas como la contaminación de nuestro entorno o el sedentarismo afectan gravemente a nuestra salud y aumentan las probabilidades de sufrir un ictus o un infarto. También son vitales factores como el estrés y la genética.
Los cardiólogos coinciden en la importancia de cambiar nuestros hábitos de vida
La contaminación, estar deprimido o tener sofocos (sobretodo a temprana edad si eres mujer)
son factores negativos para el corazón. Esto indican los estudios presentados en la Sesión Científica del Colegio Estadounidense de Cardiología.
Una investigación sobre los escáneres cardiacos y registros de actividad física de más de 2.000 adultos estadounidenses, ha mostrado que cada hora diaria de sedentarismo está asociada con un aumento de la calcificación de las arterias coronarias. La profesora de Medicina Cardiovascular de la Facultad de Wisconsin fue la principal autora del estudio.
Otros investigadores del Instituto del Corazón han analizado los registros de salud y las tasas de muerte de más de 26.000 pacientes. Los resultados revelaron que los pacientes que sufrían depresión y no tomaban tratamiento tuvieron riesgo mayor de accidentes cardiovasculares que los pacientes con medicación.«Este estudio se suma a la prueba de que, cuando se utilizan correctamente, los antidepresivos pueden mejorar los resultados cardiovasculares», declara Heidi May, epidemióloga del Instituto.
Por otra parte, el investigador Jonathan Newman, cardiólogo de la NYU Langone Medical Center, ha realizado un estudio sobre la contaminación y su repercusión en nuestra salud.
El estudio reveló que en las zonas con mayor contaminación las personas presentaban un riesgo 24% mayor de estenosis de la arteria carótida, una patología que causa más de la mitad de los accidentes cerebrovasculares que se producen en los Estados Unidos cada año.
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