jueves, 12 de marzo de 2015

LA INDUSTRIA DEL AZÚCAR MANIPULÓ LA CIENCIA COMO LA DEL TABACO

El análisis de 300 documentos muestra que empresas de EEUU influyeron en el diseño de las políticas públicas de prevención de la caries para que no se redujese el consumo de azúcar desde 1970.
La OMS recomienda no consumir más de 12 cucharillas de azucar al día.



Afirmaciones como que fumar daña tu salud es algo que hoy en día acepta todo el mundo pero no siempre fue así. 

En 1954, Robert Hockett fue contratado por el Comité de Investigación de la Industria del Tabaco en EEUU con el objetivo (no declarado) de sembrar dudas sobre los estudios que mostraban los peligros de fumar. Así las tabaqueras establecieron vías de colaboración con el Estado y sentencias judiciales de los últimos años han demostrado que la industria aprovechó esa relación para bloquear todas las medidas que perjudicaran sus intereses comerciales.

Sin embargo, las vendedoras de tabaco no han sido las únicas que han utilizado la ciencia para manipular datos científicos que podían perjudicar su negocio. De hecho, Hockett, antes de trabajar para las tabaqueras, había hecho carrera fomentando la sospecha para la industria del azúcar. El objetivo era evitar que la evidencia de sus daños sobre la salud dental se tradujese en políticas sanitarias que redujesen el consumo de azúcar.

Cristin Kearns, del Instituto de Políticas Sanitarias de la Universidad de California en San Francisco (EEUU) inició una labor de investigación para poder echar por tierra sentencias como que no hay vinculación entre el consumo de azúcares y las enfermedades crónicas que le llevó a encontrar en 2010 una serie de registros que Roger Adams, profesor emérito de Química Orgánica, había cedido a los archivos de la Universidad de Illinois. En ellos había cartas y otros documentos sobre dos instituciones de la industria azucarera que demostraban la influencia de este sector en la ciencia y política sanitaria desde finales de 1960 hasta mediados de los 90.

Kearns, junto con Stanton Glantz y Laura Schmidt, inició un proyecto de investigación de estos informes que incluían mas de 1.500 páginas y de otros documentos del Instituto Nacional para la Investigación Dental (NIDR) pertenecientes a los Institutos de Salud de EEUU. Los investigadores comprobaron en su revisión, cuyos datos se han publicado en la revista Plos Medicine, que la industria era consciente desde 1950 que el azúcar dañaba los dientes y como cada vez había más evidencia científica al respecto, se empezaron a financiar investigaciones para buscar una alternativa, distinta a la reducción del consumo de azúcar, eficaz para reducir las caries.

Ildefonso Hernández, catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad Miguel Hernández (UMH) de Alicante, afirma que tácticas como las reflejadas en los documentos publicados por PLOS Medicine siguen vigentes. “Es lo que se llama captura de la ciencia”, apunta Hernández. “La estrategia de la industria azucarera que se ve en estos documentos es la misma que sigue ahora con la obesidad, centrando el foco sobre la necesidad de hacer ejercicio y dejando a un lado la de reducir el consumo de azúcar”.

En la actualidad, la Organización Mundial de Investigación del Azúcar (WSRO), el lobby científico de la industria azucarera mundial -en el que se encuentran corporaciones como la Asociación Azucarera de EE UU y Coca-Cola, según recuerda el estudio- sigue presionando para que las políticas sanitarias no perjudiquen a su negocio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario