miércoles, 14 de diciembre de 2011
El robot Curiosity ya vuela hacia Marte
El robot Curiosity partió desde Cabo Cañaveral hacia Marte, donde tiene la misión de encontrar rastros de vida.
El equipo de lanzamiento de la Agencia Espacial de Estados Unidos lanzó el cohete United Launch Alliance Atlas V con el robot Curiosity, definido como Laboratorio Científico Marte de la NASA, que despegó de Cabo Cañaveral en el sur de la Florida, desde el Complejo Espacial de Lanzamiento-41.
martes, 13 de diciembre de 2011
Los agujeros negros, devoradores capaces de regenerar el universo
Esta semana se han descubierto dos nuevos agujeros negros. El mayor de ellos tiene el tamaño de una galaxia completa y una masa equivalente a la de 18.000 millones de soles.
Los hay de muchos tipos: gigantes, de tamaño estrella o microscópicos (conocidos como agujeros de gusano). Todos tienen características en común: son negros, no emiten ningún tipo de radiación y su gravedad es tan fuerte que ejerce su acción incluso sobre los rayos de luz. Nada puede escapar a su fuerza.
Gran expectación por los resultados del comportamiento en la partícula de Higgs.
Aunque se advierte que no habrá anuncios de un descubrimiento científico pleno, dijeron que incluso la confirmación de que se hubiera visto algo como el largamente buscado bosón de Higgs indicaría el camino a importantes avances en el conocimiento del cosmos.
jueves, 8 de diciembre de 2011
Más oscuro que el color negro
Un equipo de ingenieros de la NASA desarrolla actualmente un material más oscuro que el color negro y que ayudará a que los científicos logren realizar mediciones científicas difíciles de llevar a cabo, o consigan observar objetos astronómicos que hoy es difícil o imposible discernir, como por ejemplo planetas semejantes a la Tierra en órbita alrededor de otras estrellas.
El material ultraoscuro, basado en la nanotecnología, está siendo desarrollado por un equipo de diez expertos del Centro Goddard de Vuelos Espaciales de la NASA, en Greenbelt, Maryland.
Se trata de un delgado recubrimiento de nanotubos de carbono de pared múltiple, diminutos tubos huecos de carbono puro, aproximadamente 10.000 veces más delgados que un cabello humano. Los nanotubos tienen una multitud de usos potenciales, particularmente en la electrónica y en el campo de los materiales avanzados, gracias a sus propiedades eléctricas únicas y a su extraordinaria robustez. Pero en esta nueva aplicación, la NASA está interesada en usar la nanotecnología para ayudar a suprimir la luz errante que interfiere en las mediciones hechas con instrumental óptico.
El nuevo material logra su utilidad gracias a su peculiar estructura. Los nanotubos se colocan verticalmente. Los diminutos huecos entre los nanotubos absorben el 99,5 por ciento de la luz que incide en ellos. Eso significa que muy pocos fotones son reflejados desde el recubrimiento de nanotubos de carbono, con el resultado final de que la luz errante no puede reflejarse e interferir con la luz que los científicos quieren medir. El ojo humano ve el material como negro porque sólo una minúscula fracción de la luz se refleja desde el mismo.
Aunque este nuevo material no es en realidad tan oscuro como el que desarrolló recientemente de manera independiente otro equipo de investigadores, es, como se ha dicho, 10 veces más negro que las pinturas utilizadas actualmente por la NASA para suprimir la luz errante, y además resultará lo bastante resistente para las aplicaciones espaciales. Esa es una cualidad decisiva. No toda la tecnología puede ser usada en el espacio debido a las duras condiciones ambientales existentes allí.
Materiales autorreparables
La próxima generación de materiales que se autorreparan, una gama de productos inventada por investigadores de la Universidad de Illinois, emula a la piel humana en su capacidad de regenerarse una y otra vez. Los nuevos materiales cuentan en su estructura interna con redes microvasculares tridimensionales que emulan a los sistemas circulatorios biológicos.
"De la misma forma que un corte superficial activa el flujo de sangre para promover la curación, una grieta en estos nuevos materiales activará el flujo del agente cicatrizador para reparar el daño", explica Nancy Sottos, profesora de ciencia e ingeniería de los materiales e integrante del equipo de investigación.
En el método inicialmente desarrollado, los materiales con capacidad de autorregeneración consistieron en un agente reparador microencapsulado y un catalizador, distribuidos por una matriz compuesta. Cuando el material se agrieta, las microcápsulas se rompen y descargan el "agente curativo". Éste reacciona entonces con el catalizador interno para reparar el daño.
Para crear sus materiales autorreparadores, los investigadores comienzan construyendo un andamio mediante un proceso de deposición robótica. El proceso emplea una tinta polimérica concentrada, suministrada como un filamento continuo, para fabricar una estructura tridimensional, capa por capa.
Una vez que se ha construido el andamio, se recubre con una resina epoxídica. Después de curada, la resina es calentada y se extrae la tinta que se licua, dejando un sustrato con una red de microcanales interconectados.
En los pasos finales, los investigadores depositan un recubrimiento epoxídico quebradizo sobre el sustrato, y se llena la red con un agente reparador líquido.
Presentamos a Kepler-22b
Kepler-22b es el primer exoplaneta descubierto que orbita en la zona habitable. Está a 600 años luz de distancia, tiene 2,4 veces el radio de la tierra y orbita su sol en 289 días. Kepler 22b es el primer planeta extrasolar descubierto por el satélite de la NASA “Kepler Space Telescope” , que órbita en una zona hablitable en un sistema parecido al nuestro, llamado de tipo G.
El descubrimiento fue anunciado el día 5 de diciembre de 2011. Por el momento, se desconoce la composición de su masa y superficie. Si su densidad fuera parecida a la de la Tierra (5515 g/cm3) su masa equivaldría a la de 13,8 Tierras, mientras que la gravedad de la superficie sería 2,4 veces mayor que la de nuestro planeta. Si el planeta Kepler-22b tuviera la densidad del agua (1 g/cm3) entonces su masa sería 2,5 veces la de la tierra y su gravedad sería de 0,43 veces la nuestra.
La distancia del Kepler-22b a su estrella es un 15% menor a la distancia de la Tierra al Sol. Su órbita equivale aproximadamente al 85% de la de la Tierra y su período orbital es de 289,9 días.
La luz que irradia la estrella Kepler es un 15% menor que la del Sol. La combinación de una distancia menor a la estrella y una menor intensidad de los rayos emitidos por ésta hace suponer que, si el planeta no tiene atmósfera (caso improbable), la temperatura de su superficie será de unos -11ºC, mientras que si dispone de una atmósfera similar a la terrestre, la temperatura media del planeta estaría en unos 27ºC.
Todos estos datos combinados hacen suponer que, hasta la fecha, este planeta es el mejor candidato para poder poseer vida. Si a su masa y temperatura le sumamos la existencia de agua, se darían todas las premisas para que los elementos biológicos hicieran su aparición
martes, 6 de diciembre de 2011
¡¡ DOS AGUJEROS NEGROS DE RÉCORD !!
domingo, 4 de diciembre de 2011
Un láser de ciencia ficción ayuda a estudiar la atmósfera terrestre
La ESA está probando nuevas tecnologías para estudiar desde el espacio el cambio climático, una de las prioridades científicas de la actualidad. Un rayo láser entre dos satélites podría ayudar a medir la concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera.